Ven déjame ser el aliento
Déjame ser el amigo que te calme el sufrimiento
Quiero que sepas que estoy atento
Te ayudare a sobrepasar este mal momento
Cuenta conmigo permíteme ayudarte
Caíste pero con mi mano puedes levantarte
Habla conmigo ábreme tu corazón
No voy a dejarte solo en medio de esta situación
Aunque la tormenta nuble tu cielo
Siempre estaré dispuesto a darte consuelo
Quiero ser tu sol, la luz que te guía
Déjame devolverte la alegría.

- Temo a tu cupido que vuelva a fallar de nuevo, y hoy estés conmigo, pero mañana vuelvas con tu dueña.
+ De cupido no confió pero en ti vi esa actitud que me hizo...
- ¿Confiar?
+ Y quererte tener conmigo siempre.
- Yo que prometí, que en amor no volvería a confiar.
+ Y aquí estás
- Ahora que llegastes devuelve la vida

- Te contaré una historia, que te gustará-
- ¿Cómo sabes que me gustará si no me la has contado?
- Erase una vez una pareja de adolescente, ciegos por las locuras, no sabían el tiempo que perdían haciéndose daño, el uno al otro sin control.
- ¿Daño? ¿ Por vivir locuras?
- Si, vivieron tantas que todo se fue apagando. Esos besos que antes parecían eternos y divertidos, ya solo lo hacía para pasar las horas entretenidos. Esos momentos que antes eran los mejores, ahora solo eran pequeños recuerdos.
- Pero... ¿ no se querían?
-Si se querían, pero de tanto gastar lo que no sabían que tenían se agotó todo ese amor que les unía.
- No me gusta, es triste yo no quiero nada de eso.
- Ni lo tendrás, porque yo te quiero desde el primer día que te vi, desde el día en que te hablé me enamore de ti y esperé, tanto que esperé para que este amor creciera cada día más sin desperdiciar una sola gota.
- Cariño, no quiero que te vallas, quiero que le grites al mundo que ¡me amas!
- Te amo.
- ¿ Por qué me lo dices al oído?
- Te lo he querido decir con esta historia, te lo digo al oído porque tú eres mi mundo.

- Como duele
+ ¿Querer?
- No, amarte y no tenerte.

te amo

No quiero perder ningún detalle que venga de ti. No quiero verte marchar sin antes decirme adiós. No quiero que me odies. No quiero que me quieras. No quiero que me prometas promesas que no cumplirás. No quiero que me digas siempre, si mañana no estarás. No me digas que me quieres sin me dueles un poco más. No me digas que no te marcharás si cada día, te me vas. No me digas que no me fallarás, pues todos fallamos. No quiero que me niegues una y mil veces que no quieres hacerme daño, pues cuando lo dices me lo haces. Y si tengo que ponerle un nombre a lo que quiero de ti. Solo puedo decirte que te amo.

Grita, llorar, enfádate, rompe, destroza. Haz todo lo que quieras para desahogarte, pero nunca digas cosas que la ira te mueve a decirlas. Te puedes enfadar, todos lo hacemos, pero pocos saben controlar lo que piensan en esos momentos. No prometas que jamás volverás porque ves, estás aquí pidiendo perdón. ¿Por qué soy así? ¿ no me duele? ¿seguro? no creo que estés seguro que no me duele decirte adiós, soy así porque si para que me des amor necesito decirte adiós, lo diré. ¿Cómo soy? Soy esa pequeñaja que poco a poco te crece un poco más, soy esa niñata que día a día la caga más, pero soy esa mujer que no duda en decirte "amor".

+ ¿Por qué le quieres?
- ¿Por qué respiras?
+ Porque lo necesito para vivir
- Ahí tienes la respuesta 

No quiero

Cada vez que me tocas, me besas siento como si pudiera volar. Llegar a donde más nadie a llegado  solamente yo al estar contigo, eres mi bella poesía. Ese momento en donde no hay nada, solo tú y yo en nuestro pequeño momento, que luego quedará en nuestra memoria. No creo en el amor eterno, juré que jamás cupido me volvería a enredar en su trampa. Pero mírame, estoy aquí sentada frente a ti, contándote lo que el amor puede lograr, lo que puede suceder si piensas en todo lo vivido. Quiero abrazarte, besarte y mirarte hasta que mi mundo se quede sin días para abrazarte, sin minutos para besarte y sin horas para mirarte. Pero no, no quiero que se acabe esto, quiero que siempre me quede tiempo y lugares donde llevarte, donde decirte que te quiero sin importar el tiempo.